En caso de una emergencia médica, psicológica o psiquiátrica grave, se puede exigir la presencia inmediata de los padres o tutores del estudiante en Estados Unidos.
Por ello, al menos uno de ellos debe contar siempre con pasaporte vigente, disponibilidad y recursos económicos para viajar sin demora y asumir el cuidado total de su hijo hasta que pueda regresar a su país de origen. En tales circunstancias, el programa del estudiante se dará por terminado, y tanto los padres como los estudiantes deben aceptar esta condición antes de aplicar. Aquellos que no puedan cumplir con este requisito no deben participar en el programa.